Peter Lynch habla de las ventajas del inversor amateur en el libro "Un paso por delante de Wall Street" En este libro, Lynch nos dice que el inversor amateur tiene numerosas ventajas implícitas, que bien explotadas, deberían hacer que su actividad resultara más rentable que la de los profesionales y que la del mercado en general.
También matiza, que no hay nada de malo, en los fondos de inversión, si éstos son rentables para el inversor.
Lynch defiende a los fondos para aquellas personas que no tienen ni el tiempo, ni el humor de poner a prueba su talento en bolsa, así como, para aquellos que con poco dinero buscan una diversificación para minimizar el riesgo.
Cuando se decide actuar libremente, se debe obviar el consejo de moda, las recomendaciones de los bróker y las últimas sugerencias de los analistas de la prensa económica.
Lynch dice que no hay que ser un lince, para descubrir las empresas cuya actuación es espectacular antes que lo haga la bolsa. Basta con prestar un poco de atención en el trabajo, o en el centro comercial del vecindario. Según él, los mejores análisis fundamentales hay que buscarlos en la calle, viendo cómo reaccionan los consumidores ante una marca, si una tienda está llena, si hay colas......
En definitiva, nos viene a decir, que el inversor amateur al estar menos involucrado en las matemáticas y más en los hechos físicos ( tiendas llenas, colas, calidades...) puede tener mejor perspectiva al apostar por una acción.
Otra de las ventajas que tiene el inversor amateur, es que no tiene restricciones al invertir determinadas cantidades de dinero en una acción en concreto. En cambio, los fondos tienen restricciones que tienen que cumplir y que les impone la CNMV.
Los fondos al entrar en small caps, pueden provocar un movimiento muy brusco en la cotización y ello les impide aprovechar los buenos precios, que si puede realizar el inversor amateur, al comprar en cantidades más pequeñas.
Asimismo, los fondos tienen la obligación de invertir en un número más grande de acciones. La CNMV les obliga a diversificar el riesgo. El inversor particular no tiene restricciones y pude invertir en lo que quiera concentrando su cartera en ocho o diez valores.
Os dejo una charla muy interesante sobre el tema. Espero que os guste.
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